domingo, 12 de octubre de 2014

Se confirma primera persona en contraer ébola en EEUU

DALLAS, EEUU (Reuters) - Una trabajadora de la salud en Texas contrajo ébola luego de tratar a un liberiano que murió de la enfermedad en un hospital de Dallas la semana pasada, agudizando las preocupaciones sobre cómo se violaron los protocolos médicos en Estados Unidos que tienen por objetivo detener la propagación de la enfermedad.

El Hospital Presbiteriano en Dallas, Texas, donde se anunció el nuevo caso el domingo, ya ha enfrentado críticas por su manejo de la infección.

La trabajadora infectada, que no fue identificada, es la primera persona en contraer la enfermedad en Estados Unidos. La mujer tuvo contacto cercano y frecuente con Thomas Eric Duncan, que murió el miércoles, durante los once días de tratamiento a los que fue sometido, dijeron funcionarios de salud.

El actual brote de ébola, el peor en la historia de la enfermedad, ha causado la muerte de más de 4.000 personas, la mayoría en Liberia, Sierra Leona y Guinea, en Africa Occidental. Duncan, un liberiano, estuvo expuesto al ébola en su país y desarrolló la enfermedad mientras visitaba Estados Unidos.

El nuevo caso en Texas muestra un descuido profesional que podría haber causado que otros trabajadores del hospital también resultaran infectados, dijo Dr. Thomas Frieden, director del Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC, por su sigla en inglés).

"No sabemos qué ocurrió en el cuidado del paciente original en Dallas, pero en algún momento hubo una falla en el protocolo, y eso dio como resultado esta infección", dijo Frieden en una conferencia de prensa.

Funcionarios del hospital dijeron que la trabajadora usó el equipo de protección recomendado por el CDC durante el tratamiento, incluyendo trajes, guantes y mascarilla.

"Estamos evaluando otras posibles exposiciones potenciales de trabajadores de la salud porque si este individuo fue expuesto, y lo fue, es posible que otros individuos hayan sido expuestos", agregó.

Pruebas iniciales mostraron que el nivel del virus en la trabajadora es bajo. El CDC llevará a cabo pruebas secundarias para confirmar los resultados de un laboratorio en Austin que mostraron la infección con ébola, dijo.

"Desafortunadamente es posible que en los próximos días veamos nuevos casos de ébola", agregó.

Frieden dijo que hubo una persona que pudo haber tenido contacto con el trabajador de salud infectado cuando podría haber transmitido la enfermedad, y que esa persona estaba en observación.

Ninguna de las diez personas que tuvo contacto con Duncan ni las 38 que entraron en contacto con ese grupo han mostrado síntomas, dijeron funcionarios de salud. La trabajadora infectada no está entre las 48 personas que fueron puestas en observación.

El hospital de Dallas no logró reconocer que Duncan tenía síntomas de ébola cuando acudió por primera vez a emergencias. El paciente fue enviado a casa, lo que potencialmente le habría permitido exponer a otros al virus. Pese a que fue admitido en el hospital dos días después, su familia llamó a que se examinen los pasos que se siguieron en su cuidado.

INSPECCIONES ADICIONALES

El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, ordenó a autoridades federales a tomar medidas adicionales para garantizar que el sistema médico estadounidense está preparado para seguir los protocolos correctos para lidiar con el ébola, dijo la Casa Blanca en un documento el domingo.

En un esfuerzo por detener la propagación de la enfermedad, funcionarios de sanidad iniciaron el sábado en el aeropuerto John F. Kennedy de Nueva York el control de viajeros provenientes de los tres países más afectados por el virus en África Occidental.

El número de personas fallecidas en el peor brote de ébola del que se tenga registro subió a 4.033 de entre 8.399 casos en siete países, dijo el viernes la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Liberia ha sido el país más afectado, con 2.316 víctimas fatales, seguida por Sierra Leona, con 930 muertos, Guinea, con 778, Nigeria, con ocho, y Estados Unidos, con uno, afirmó la OMS.