LONDRES (AP) -- Catorce niños que vivían en un campo de refugiados en Francia llegaron el lunes a Gran Bretaña para reacomodarse con sus familias. Se trata de los primeros menores procedentes del campo en Calais de decenas que serán reubicados esta semana en el Reino Unido.
Funcionarios del gobierno y empleados de organizaciones de ayuda llevaron a los menores, de entre 14 y 17 años, a una oficina de inmigración en el sur de Londres antes de reunirse con sus familiares, algunos en iglesias locales.
Presionado por organizaciones benéficas, líderes religiosos y autoridades francesas, Londres aceptó recibir a docenas de menores procedentes del campamento de refugiados en Calais y que tengan familiares en Gran Bretaña, junto con otros 3.000 niños migrantes vulnerables.
Asif Khan dijo que su hermano de 14 años es uno de los que llegará a Gran Bretaña después de pasar seis meses en el campamento de refugiados conocido como "La Jungla". Dijo que reunirse con su hermano era "una bendición".
"Su viaje fue muy difícil, caminando y en autobús llegó a Calais", agregó Khan. "Ahora tiene una nueva vida, porque muchas personas murieron en Calais".
Por ser una isla, prácticamente no han llegado a Gran Bretaña los miles de migrantes que en el último par de años han huido de la guerra y las penurias económicas en países como Siria, Irak y Afganistán, y realizan peligrosas travesías para llegar a Europa.
Miles de migrantes han llegado a la localidad francesa en el canal de La Mancha con la esperanza de cruzar a territorio británico. Calais está cerca de la entrada a un túnel submarino de 50 km (31 millas) que une a Inglaterra y Francia.
Francia ha dicho que pronto cerrará Calais. Eso significa que de 6.000 a 10.000 migrantes serán reubicados, incluyendo 1.300 menores, de acuerdo con diferentes cálculos de organizaciones que operan el campamento.
Alf Dubs, político del Partido Laborista y quien ha presionado para que Gran Bretaña reciba a más niños migrantes, dijo que todos los menores en los campamentos deben encontrar casa antes de que este sea demolido.
"Ningún niño debe quedarse detrás en el caos y la demolición", dijo Dubs, quien llegó al país entre los niños judíos salvados de la ocupación nazi en Checoslovaquia en 1939. "Viendo al futuro, nunca debemos permitir que se repita un Calais".
El ex arzobispo de Canterbury, Rowan Williams dijo que las llegadas del lunes marcan "el inicio de lo que espero sea en el siguiente par de semanas una labor seria y compartida por organizaciones voluntarias y de gobierno en este país". News from The Associated Press