Washington, 14 de abril, 2017 (Reuters). El presidente estadounidense, Donald Trump, ganó su primera gran batalla en su guerra contra la inmigración ilegal y lo hizo sin construir el muro prometido.
La victoria fue anunciada la semana pasada por el Departamento de Serguridad Interior (DHS), que divulgó cifras que muestran una caída de un 93 por ciento desde diciembre de los padres con hijos capturados al intentar cruzar la frontera con México de manera ilegal.