CIUDAD DEL VATICANO (AP) — El papa Francisco se dirige a Myanmar y Bangladesh en medio de una intensa crisis de refugiados rohingya que la comunidad internacional ha criticado como “limpieza étnica”, pero la Iglesia católica ha defendido a la líder civil Aung San Suu Kyi como la única esperanza para la democracia en Myanmar.
Así, el pontífice caminará por una tensa cuerda floja diplomática durante su visita del 27 de noviembre al 2 de diciembre, la cual incluirá reuniones por separado con Suu Kyi, el poderoso jefe de las fuerzas armadas de Myanmar y un pequeño grupo de musulmanes rohingya una vez que el papa llegue al vecino Bangladesh. (Foto ARCHIVO 4 de mayo de 2017, la líder de Myanmar, Aung San Suu Kyi, izquierda, es recibida por el papa Francisco en el Vaticano. Foto vía AP, archivo)