BUTEMBO, República Democrática del Congo (AP) — Una mujer pasó más de una semana enferma en casa hasta que miembros de la familia intentaron llevarla a un centro de atención para el ébola en el este de la República Democrática del Congo. Antes de que la motocicleta llegara a la clínica, ya era demasiado tarde.
Su cuerpo se desvaneció sobre la espalda del conductor, mientras que él llamaba desesperadamente por teléfono, según testigos.
Los expertos de salud han manifestado su alarma debido al número de infectados con el virus del ébola que nunca llegan a los centros de atención, permitiendo que la enfermedad se transmita a los empleados de salud e innumerables personas más.