Filadelfia, 16 de febrero, 2017 (AP). Inmigrantes en todo Estados Unidos tenían previsto quedarse en casa el jueves en lugar de ir a clase o a trabajar, para demostrar lo importantes que son para la forma de vida y la economía estadounidense.
Había actos del "Día sin inmigrantes" convocados en ciudades como Filadelfia, Washington, Boston, Houston, Chicago y Nueva York. El apoyo a la protesta ganó fuerza en medios sociales y con el boca a oreja.
La iniciativa es una respuesta al presidente Donald Trump, cuyo gobierno ha prometido aumentar la deportación de inmigrantes que viven en el país de forma ilegal.
Trump basó su campaña en la construcción de un muro a lo largo de la frontera entre Estados Unidos y México y atribuyó el alto desempleo a la inmigración. Como presidente ha pedido vetar la entrada en el país de viajeros de siete países de mayoría musulmana.
Los organizadores esperaban que miles de personas participaran en las protestas para demostrar solidaridad con los trabajadores.