Varias organizaciones internacionales de los sectores del transporte y el turismo, junto con la Organización Mundial de la Salud (OMS), decidieron establecer un grupo de expertos para supervisar e informar oportunamente de los temas relacionados con los viajes y el brote de Ébola.
El riesgo de propagación del mal a través de desplazamientos por avión es bajo, recordó la OMS, pues a diferencia de la tuberculosis y la gripe, el virus del Ébola no se transmite por el aire que se comparte.
El contagio requiere contacto con las secreciones de una persona enferma, recalcó el organismo.
La mayoría de las infecciones tienen lugar en comunidades de los países afectados; Liberia, Guinea, Sierra Leona y Nigeria, cuando los familiares cuidan de alguien con el padecimiento o bien en las ceremonias fúnebres.
Un segundo punto de riesgo de contagio son las clínicas y hospitales.
La OMS subrayó que los países libres del mal deben reforzar su capacidad de detectar y contener inmediatamente los casos, además de evitar medidas que podrían crear interferencias innecesarias con el comercio internacional y la circulación de personas.
Por otra parte, requirió a los países afectados que realicen controles de todas las personas en aeropuertos internacionales, puertos marítimos y los cruces fronterizos por tierra, para detectar potenciales casos de Ébola. También recomendó prohibir el viaje de personas infectadas a no ser que se trate de una evacuación médica.