AUSTIN, EEUU (Reuters) - Funcionarios de salud de Texas reportaron el martes el primer caso de transmisión del virus de Zika en Estados Unidos y dijeron que podría haber sido a través del contacto sexual con una persona que estuvo en Venezuela y no por la picadura de un mosquito.
El virus, asociado con casos de microcefalia en recién nacidos en Brasil, se está expandiendo con rapidez en América y el martes la Organización Mundial de la Salud (OMS) dijo que podría extenderse a África, Asia y el sur de Europa.
El Servicio de Salud del condado de Dallas informó que recibió la confirmación de la infección de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC, por su sigla en inglés).
La persona infectada no viajó a ningún país afectado por el Zika y adquirió el virus de alguien que estuvo en Venezuela, agregó el departamento de Salud del condado en una publicación en Twitter. No dio más información por respeto a la privacidad.
El Departamento de Salud Pública de Texas fue ligeramente más cauto en su apreciación. "Se están evaluando los detalles del caso, pero la posibilidad de transmisión sexual de una persona infectada a una no infectada es posible en este caso", dijo en un comunicado.
Las autoridades locales dijeron que no había reportes de que el virus se estuviera transmitiendo a través de mosquitos en Texas.
Un portavoz de los CDC confirmó los resultados de la infección con Zika, pero dijo que se está investigando el modo de transmisión.
Se han confirmado ocho casos de Zika en Texas, siete de los cuales fueron en personas que viajaron al exterior, dijo el departamento de Salud local.
Previamente, funcionarios internacionales de salud habían mencionado un caso de un posible contagio entre personas por contacto sexual. Sin embargo, la Organización Panamericana de la Salud dijo que se necesita más evidencia para confirmarlo.
En la literatura médica, ha habido sólo un caso de Zika transmitido sexualmente y un caso en el cual el virus fue detectado en semen.
La OMS ha dicho que el virus podría infectar a unas 4 millones de personas. Mundo | Reuters