DOMENI, Grecia (Reuters) - Después de pasar semanas varados en una frontera cerrada en el norte de Grecia, inmigrantes y refugiados buscan nuevas rutas irregulares para llegar a Macedonia, escalando colinas y atravesando bosques bajo la protección de la oscuridad.
A medida que caía el crepúsculo el sábado, un testigo Reuters vio a un grupo de hasta 70 personas cruzar hacia Macedonia desde Grecia, en un punto donde no hay una alambrada entre los dos países. Entraban y salían de los bosques, ocultándose de las autoridades.
El cruce ocurrió a unos 20 kilómetros o a unas cuatro horas caminando desde Idomeni, un creciente campamento de tiendas de campaña que recibe a miles de refugiados e inmigrantes que quedaron varados luego de una seguidilla de cierres fronterizos en los Balcanes en febrero.
Otros en el campamento también evaluaban sus opciones para dejar Idomeni y hallar puntos vulnerables a lo largo de la frontera para acceder a los Balcanes, la ruta preferida hacia Europa occidental.
"No hay otra solución", dijo Moutaz, un sirio proveniente de Alepo. "Que él (otros) se ponga en mi posición, ¿Qué haría él con esta vida que estamos viviendo? ¿Él estaría bien con ella, con lo que está ocurriendo y lo que está viendo?", agregó.
Organizaciones de derechos humanos dicen que las condiciones de vida en Idomeni son deplorables.
Su compatriota Eyas, proveniente de Damasco, dijo que intentaría cruzar la frontera con Albania más al occidente. "Hay una posibilidad de cruzar por la ruta hacia Macedonia, pero el Ejército macedonio te enviará de regreso", dijo a Reuters.
Algunos se arriesgan a caminar por sí solos. Otros usan a traficantes de personas, que cobran entre 350 y 600 dólares por cada individuo por hacerlos cruzar la frontera.
Un millón de inmigrantes, muchos que huyen desde Siria, Irak, Afganistán y otros países en conflicto en Oriente Medio, Asia y África han ingresado a Europa a través de Grecia desde el año pasado. Reuters