
Algunas naciones de la Unión Europea, incluida Alemania, han fortalecido temporalmente controles fronterizos en momentos que cientos de miles de personas que huyen de conflictos y pobreza han buscado asilo.
La Comisión dijo el martes que el costo directo de cualquier medida permanente podría llegar a entre 5,000 y 18,000 millones de euros por año.
Incluiría transportación terrestre más cara, el impacto de atrasar y controlar más de 1,000 millones de cruces fronterizos por año, así como costos administrativos y aduanales.
El cálculo no considera el impacto sobre el turismo, volúmenes de comercio más bajos, cambios en las cadenas de producción y el posible debilitamiento del sistema de visa común de la Unión Europea.