Madrid, 28 de diciembre, 2016 (Reuters). Madrid impondrá por primera vez la restricción de la circulación de vehículos por los altos niveles de contaminación que sufre la capital de España, informó el ayuntamiento local el miércoles.
Las autoridades municipales activaron el escenario 3 del protocolo en vigor, lo que llevará a que el jueves sólo podrán circular los vehículos con matrícula impar, en unos días semifestivos con menor tránsito.
"En esta época hay menos tráfico y ha habido un efecto disuasor con el cierre de (la céntrica avenida) Gran Vía, pero tenemos una situación meteorológica muy difícil que solemos tener en esta época", dijo Paz Valiente, directora general de Sostenibilidad y Control Ambiental del Ayuntamiento.
Valiente explicó que un fenómeno de presión térmica habitual en estas fechas está evitando que la ciudad "se ventile", por lo que los niveles de contaminación han subido a pesar de la menor circulación registrada. "Es una cuestión importantísima de salud pública", añadió la primera teniente alcalde, Marta Higueras.
La medida se aplicará desde las 6:30 hasta las 21:00 horas, periodo en el que, según han explicado las responsables locales, el Ayuntamiento garantizará la movilidad de los ciudadanos con refuerzos al transporte público. Las infracciones serán sancionadas con una multa de hasta 90 euros (93,6 dólares).
La duración de la medida se irá decidiendo día a día, de acuerdo a los datos meteorológicos que se vayan recibiendo, y las matrículas afectadas se alternarán entre pares e impares cada jornada. "Estamos en un episodio de larga duración y no se prevé que hayan grandes cambios ante esta situación anticiclónica", advirtió Valiente.
Los taxis, vehículos limpios o aquellos que lleven tres o más ocupantes estarán exentos de las restricciones, así como los vehículos de carga que cuenten con los permisos necesarios para realizar su labor. A los residentes de la zona central de Madrid también se les aplicarán las restricciones.
Es la primera vez que Madrid alcanza el tercer escalón de este protocolo más agresivo aprobado hace casi un año por el Ayuntamiento, después de la aplicación de limitaciones al estacionamiento y a la velocidad en los últimos días y que aún seguirán en vigor hasta que se reduzcan los niveles de polución.