RANGÚN (Reuters) - Amnistía Internacional retiró su máxima distinción por trabajo por los derechos humanos a Aung San Suu Kyi, acusando a la líder de Myanmar de perpetuar los abusos al no manifestarse contra la violencia que sufre la minoría musulmana rohinyá.
Tras haber sido reconocida por su participación en la lucha por la democracia, a Suu Kyi se le han quitado una serie de honores internacionales ante el éxodo de los rohinyás, que se inició en agosto del 2017.
Más de 700.000 miembros del grupo minoritario huyó hacia Bangladesh luego de que el Ejército de Myanmar lanzó una operación represiva en respuesta a los ataques insurgentes contra las fuerzas de seguridad.
Investigadores de Naciones Unidas han acusado al Ejército de desatar una campaña de asesinatos, violaciones e incendios intencionales con una “intención genocida”.
El gobierno de Suu Kyi rechazó los hallazgos, que dijo eran parciales, y declaró que la acción militar se enmarcaba en una operación legítima de contrainsurgencia. Amnistía
En la imagen, la líder del Gobierno de Myanmar, Aung San Suu Kyi, durante la inauguración de la cumbre ASEAN en Manila, Filipinas, el 13 de noviembre de 2017. REUTERS/Athit Perawongmetha