CIUDAD DEL VATICANO (AP) — Órdenes religiosas católicas de todo el mundo se disculparon el martes por no responder cuando sus sacerdotes violaron a niños, reconociendo que sus comunidades los cegaron a los abusos sexuales y generaron lealtades, negaciones y encubrimientos fuera de lugar.
Dos organizaciones que representan a las órdenes religiosas masculinas y femeninas del mundo emitieron una declaración conjunta en vísperas de la cumbre del papa Francisco sobre la prevención del abuso sexual.
Se comprometieron a implementar medidas contra superiores que encubran denuncias de abuso y para que los niños estén a salvo.
Con unas pocas excepciones, las órdenes religiosas han volado en gran medida bajo el radar en el escándalo de abusos durante décadas, ya que se ha centrado en cómo los obispos diocesanos protegían a sus sacerdotes. Sin embargo, congregaciones como los jesuitas, los salesianos y los hermanos cristianos tienen algunos de los peores registros.
Muchas de las órdenes trasladaron a curas abusadores de un cargo a otro y aun así los padres tenían acceso a menores de edad, pues muchas órdenes se dedican a regentar escuelas.
La Unión General de Superiores representa a los religiosos hombres, en total aproximadamente unos 133.000 alrededor del mundo. La Unión Internacional General de Superioras representa a unas 500.000 hermanas. Cada una de esas uniones enviará a una docena de delegados al cónclave convocado por el pontífice esta semana en el Vaticano.
En el comunicado, las asociaciones lamentan haber decepcionado a los niños a quienes debían proteger, y atribuyeron su ceguera al “fuerte espíritu de familia” que domina sus filas.
“Ello llevó a una lealtad desacertada, errores de juicio, tardanza en responder, negación y a veces al encubrimiento”, dicen las agrupaciones en el comunicado.
Añade: “Todavía queremos la conversión y queremos cambiar. Queremos actuar con humildad. Queremos descubrir nuestras fallas. Queremos identificar todo abuso de poder”.
El comunicado lamenta también las revelaciones recientes de que curas y obispos abusaron sexualmente de seminaristas y monjas, un abuso que ha quedado en gran parte impune debido a que las víctimas eran adultos.
Aunque admiten que el cónclave papal se centrará en el abuso de menores, las agrupaciones prometen responder a la crisis.
“Este es un asunto de urgencia grave y asombrosa”, expresaron. AP
Miembros de la organización Fin al Abuso Clerical posan para una foto frente al Vaticano, el lunes 18 de febrero de 2019. (AP Foto/Gregorio Borgia)