WASHINGTON (AP) — Días después de que la Corte Suprema de Estados Unidos impidiera añadir una pregunta sobre ciudadanía en el conteo de población 2020, la Oficina del Censo del Departamento de Comercio comenzó el martes el proceso de impresión de los cuestionarios sin la controvertida cuestión.
Los abogados del gobierno del presidente Donald Trump notificaron a las partes involucradas en demandas que impugnan la pregunta, que comenzaría la impresión de los cientos de millones de documentos relacionados con el censo 2020, dijo Kristen Clarke, directora ejecutiva del National Lawyers’ Committee for Civil Rights Under Law.
La portavoz del Departamento de Justicia, Kelly Laco, confirmó que “no habrá pregunta sobre ciudadanía en el censo de 2020”.
El secretario de Comercio, Wilbur Ross, afirmó que aunque respeta la decisión de la Corte Suprema, está en total desacuerdo con ella.
“La Oficina del Censo ha comenzado el proceso de imprimir los cuestionarios decenales sin la pregunta”, afirmó Ross en un comunicado. “Mi interés, el de la Oficina y el de todo el Departamento es realizar un censo completo y exacto”.
Después de que la Corte Suprema emitiera su fallo la semana pasada, Trump dijo que consultaría con sus abogados sobre la posibilidad de aplazar el censo hasta que el máximo tribunal pudiera revisar el asunto, haciendo surgir dudas de si la impresión de los materiales daría inicio este mes.
Durante meses, el gobierno de Trump había argüido que las cortes debían decidir con rapidez sobre la inclusión de la pregunta sobre ciudadanía debido al plazo para comenzar esta semana la impresión.
Aunque la Oficina del Censo confía en que la mayoría de los consultados responda el cuestionario por internet el año entrante, cientos de millones de postales y cartas se enviarán en marzo a los habitantes para recordarles que habrá censo, y quienes no lo hagan por la red tendrán que hacerlo en cuestionarios de papel que les serán enviados por correo.
“El fallo de la Corte Suprema da poca oportunidad para que el gobierno subsane los defectos resultantes de su decisión de incluir una pregunta sobre ciudadanía y, lo más importante, simplemente no hay tiempo dado el plazo para imprimir los formularios”, afirmó Clarke en un correo electrónico.
Los detractores aseguran que la pregunta desalentaría la participación de inmigrantes y de residentes que están en el país de manera ilegal, redundando en cifras inexactas para un conteo que determina la distribución de un gasto federal de 675.000 millones de dólares y la cantidad de distritos legislativos de cada estado. AP