Ginebra, (EFE).- El relator especial de ONU para los derechos humanos y la lucha contra el terrorismo, Ben Emmerson, criticó hoy el alegato de Donald Trump en favor de la tortura, y pidió que se lleve ante la Justicia a los responsables del programa de torturas de la CIA durante la Administración de George W. Bush.
Emmerson entregó hoy su último informe como relator especial, cargo que ejerce desde 2011, y dijo en rueda de prensa que el nuevo presidente estadounidense está "mal preparado para gobernar".
"Escuchar al presidente Trump, poco después de asumir el cargo, ensalzar las virtudes de la tortura como arma para luchar contra el terrorismo, me heló la sangre", reconoció el relator especial en su declaración oral ante la 34ª sesión del Consejo de Derechos Humanos.
Teme que la posición del jefe de Estado estadounidense pueda sentar "un precedente" para otros países.
Trump ha aclarado que, aunque él defiende el uso de la tortura en los interrogatorios a los sospechosos de terrorismo, dejará que su secretario de Defensa, quien se opone a esa táctica, tome la decisión sobre si hay que retomarla o no.
Asimismo, Emmerson acusó a Trump de avivar el resentimiento que alimenta el riesgo de terrorismo y de facilitar los argumentos que el grupo yihadista Estado Islámico esgrime para reclutar a nuevos miembros en los países occidentales.
"Si una de las naciones más poderosas del mundo, un miembro permanente del Consejo de Seguridad de la ONU, está preparada otra vez para abandonar los valores colectivos bajo el pretexto de defenderlos, me pregunto si se ha conseguido algo en los últimos quince años", declaró.
El experto de la ONU cuestionó si se podrá conseguir algún tipo de progreso en la lucha antiterrorista en el contexto actual en el que el presidente de Estados Unidos está dispuesto a repetir por razones "populistas" y de "patriotismo exaltado" el que fue el "mayor acto ilegal" perpetrado por la Administración Bush.
Emmerson se refirió al programa secreto de cárceles, de detención y de rendición ejecutado por la CIA en la era de George W. Bush, bajo el cual se aplicó la tortura en los interrogatorias a sospechosos de terrorismo.
El experto volvió a exigir "la rendición de cuentas de funcionarios que se han visto implicados en violaciones graves y sistemáticas de los derechos humanos en el transcurso de operaciones antiterroristas".
"Reitero mi consternación ante el fracaso de Estados relevantes, y en concreto de Estados Unidos, a la hora de tomar medidas efectivas para llevar ante la Justicia a aquellos responsables de las detenciones secretas y del programa de torturas" de la CIA, dijo el relator.
Emmerson lamentó que, aunque las identidades de los responsables "sean conocidas" y las pruebas para condenarlos disponibles, "ninguno ha tenido que responder ante un juez por lo que hizo". EFE