Ginebra, 13 de diciembre, 2016 (Reuters). El jefe de Derechos Humanos de Naciones Unidas instó el martes a la comunidad internacional a exigir que Siria permita la supervisión del trato que da a las personas que huyen de la "masacre" en Alepo, y advirtió que otras localidades en manos de los rebeldes podrían sufrir el mismo destino.
El ejército sirio y sus aliados tomaron el control completo de todos los distritos de Alepo dejados por los rebeldes en su retirada, dijo una fuente militar siria, mientras que miles de personas huyeron de los frentes de combate en la ciudad.
"La destrucción de Alepo, una cifra de muertos (...) tan aterradora que no puede medirse, el derramamiento de sangre, la masacre gratuita de hombres, mujeres y niños, la destrucción (...) y estamos lejísimos del final de ese conflicto cruel", declaró Zeid Ra'ad al Hussein en un comunicado.
"Lo que está sucediendo en Alepo podría repetirse en Douma, en Raqqa, en Idlib", agregó el diplomático. "No podemos permitir que esto continúe".
Por su parte, UNICEF alertó el martes que decenas de niños solos están atrapados en un edificio que está siendo fuertemente atacado en la zona este de Alepo.
"Según reportes alarmantes de un médico en la ciudad, muchos niños, posiblemente más de 100, sin compañía o separados de sus familias, están atrapados en un edificio que está bajo un fuerte ataque en el este de Alepo", dijo el director regional de UNICEF, Geert Cappelaere, en un comunicado.