Washington, 2 may (EFE).- El secretario en funciones del Departamento de Seguridad Nacional de EE.UU. (DHS), Kevin McAleenan, reconoció este jueves que todavía hay "en torno a una docena" de menores inmigrantes que no han sido reunidos con sus familiares tras haber sido separados en la frontera.
"Se trata de en torno a una docena (de menores) cuyos padres aún no han sido localizados", declaró McAleenan durante una audiencia celebrada este jueves en el Senado.
Ante la insistencia de la legisladora demócrata Jeanne Shaheen, el funcionario subrayó que se trata de un número "muy pequeño" de casos y apuntó que los tribunales conocen esta cifra.
Cerca de 3.000 menores fueron separados de sus padres el año pasado durante las cerca de seis semanas que estuvo vigente la política de "tolerancia cero" implantada por la Casa Blanca, que ordenaba la separación de los menores que entraban irregularmente en el país junto con sus familiares a través de la frontera con México.
Esta medida fue finalmente suspendida por orden del juez federal Dana Sabraw que bloqueó las separaciones de familias inmigrantes en la frontera y ordenó al Gobierno que reuniera con sus padres a unos 2.800 menores que hasta ese entonces se habían calculado como afectados por esa política.
La Administración llegó a reconocer en ese momento que desconocía el paradero de muchos parientes de estos menores, lo que llevó a Sabraw a dar a las autoridades un plazo de seis meses para reunificar a estas familias.
El Gobierno nunca llegó a cumplir ese plazo, tal y como quedó patente durante el testimonio ofrecido por McAleenan este jueves.
El funcionario advirtió, además, de que no todos los menores serán finalmente entregados a sus familiares "por decisión de los padres o por su propia seguridad".
McAleenan sostuvo que esa situación en la frontera se debió a unas "circunstancias extremadamente extraordinarias" que, no obstante, indicó, no parecen haber mejorado en los últimos meses.
En marzo, la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) "aprehendió a más de 130.000 migrantes cruzando la frontera de forma irregular, la mayor cifra en más de una década (...) Expresado de manera simple, nuestro sistema está lleno y la situación supera nuestra capacidad", dijo McAleenan.
EE.UU. no tenía forma de conectar a los niños separados de sus padres en la frontera
EE.UU. no contaba con la información para reunir a los padres inmigrantes separados de sus hijos, reveló este jueves la prensa local, citando fuentes que desvirtúan la versión de la Administración de Donald Trump de que contaba con una "base de datos centralizada" para facilitar las reunificaciones.
La cadena estadounidense CBS News dijo haber obtenido correos electrónicos que intercambiaron oficiales del Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS) y del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), en los cuales se evidencia la falta de información.
"Tenemos una lista del número de padres extranjeros, pero no tenemos manera de vincularlos con los niños", señaló un oficial del HHS a un alto funcionario de ICE, según un correo del 23 de junio del año pasado difundido por CBS News.
La cadena apuntó que la Administración de Trump había afirmado entonces que reuniría a centenares de familias inmigrantes con la ayuda de una base de datos central.
"El tipo y el volumen de lo que está solicitando (...) no es algo que podamos completar de manera rápida", admitió en un correo un funcionario de ICE identificado por CBS como Matthew Albence.
La versión periodística añadió que en los correos se dice que el Gobierno solo tenía información suficiente para volver a conectar a 60 padres con sus pequeños.
En junio del año pasado, el juez federal Dana Sabraw emitió un mandato que bloqueó la separación de familias en la frontera entre EE.UU. y México, y ordenó a la Administración federal que reuniera con sus padres a unos 2.800 menores que hasta ese entonces se habían calculado como afectados por la política de "tolerancia cero".
Dicha estrategia incluía el "enjuiciar" al 100 % de los indocumentados arrestados al cruzar la frontera ilegalmente y separarlos de los hijos en caso de viajar con ellos.
Como consecuencia de la orden de Sabraw, hasta el pasado 25 de marzo, la Administración había reunido a 2.749 de un total de 2.814 niños que fueron separados de sus progenitores tras llegar a la frontera para solicitar asilo político.
Un documento judicial al que Efe tuvo acceso a comienzos de abril indicó que el Gobierno de EE.UU. estima que le tomará hasta dos años identificar a las miles de familias migrantes adicionales que fueron separadas en la frontera con México.
CBS indicó que casi un año después unos 55 niños separados el año pasado bajo "tolerancia cero" aún permanecen bajo custodia del HHS en distintos refugios en el país.
Al referirse al sistema de asilo en EE.UU., el director de servicios de la organización latina y proinmigrante CASA, George Escobar, remarcó a Efe la necesidad de una "reforma integral" en los temas migratorios, que, a su juicio, refleje "la realidad de las familias".
"En este país es imposible conseguir asilo si uno está huyendo por razones de violencia interna, uno tiene que ser perseguido por su etnia o por su raza, por su religión. Es un sistema antiguo", apuntó.
Para este experto, muchos de los migrantes son "personas que están huyendo porque no tienen otra (opción), porque corren el riesgo de ser asesinadas en sus países de origen". :: EFE USA -
El secretario en funciones del Departamento de Seguridad Nacional de EE.UU. (DHS), Kevin McAleenan. EFE/Archivo