WASHINGTON (AP) — Acelerando el paso para detener el previsto aumento en los casos del nuevo coronavirus, la Casa Blanca presentó el lunes una serie de directrices que durante los próximos 15 días modificarán temporalmente las normas de la sociedad estadounidense.
El presidente Donald Trump exhortó a los adultos mayores a quedarse en casa, y a todos los estadounidenses a evitar las multitudes y a no comer en restaurantes. Por primera vez, el mandatario reconoció que la pandemia podría enviar a la economía estadounidense a una recesión y señaló que la nación podría tener que lidiar con el virus hasta “julio o agosto”.
Las directrices fueron publicadas en momentos en los que el país se encuentra sumido en desasosiego. El mercado de valores tuvo su peor día desde 1987, el sistema escolar más grande de Estados Unidos cerró sus puertas y seguía habiendo preguntas sobre la capacidad del gobierno para realizar las pruebas del coronavirus y dar espacio a los hospitales para atender a aquellos que se enfermen.
Entre las nuevas recomendaciones están: En el próximo medio mes, los estadounidenses no deberán reunirse en grupos que superen las 10 personas, las clases se llevarán a cabo en casa y se deberán evitar los viajes discrecionales y visitas sociales. Si alguien da positivo al virus en una vivienda, todos los que vivan allí deberán quedarse en casa. El gobierno no especificó cuán mayores deberán ser las personas para seguir la recomendación de quedarse en sus hogares.
“Nos uniremos como nación y venceremos al virus”, dijo Trump. “Podemos cambiar la situación y hacerlo rápidamente”.
El presidente, cuando le preguntaron si la pandemia desaparecería, respondió que “si hacemos un muy buen trabajo” la crisis podría terminar en el verano. El médico Anthony Fauci, experto de enfermedades infecciosas del gobierno, no refutó esa afirmación.
El pronóstico de Trump del lunes fue mucho menos optimista que los anteriores, cuando insistió en que terminaría en cuestión de semanas. También reconoció que el virus podría enviar a la economía de la nación a una recesión, un potencial golpe brutal para un presidente que busca reelegirse en año electoral.
El reconocimiento fue algo sorprendente viniendo de Trump, quien durante dos semanas había mostrado un desconcertante tono optimista sobre la pandemia que ponía en peligro su presidencia. El lunes, ese comportamiento optimista desapareció mientras admitía que el virus no estaba “bajo control” en Estados Unidos ni en el resto del mundo.
Señaló que aún no planeaba implementar restricciones a los viajes nacionales, y su gobierno solicitó a los milenials dejar de socializar y propagar el virus. Se mostró reacio a recomendar a los estados a que cancelaran las elecciones primarias que tenían programadas. Y sin dar más detalles, dijo: “Vamos a apoyar a las aerolíneas 100%”, en lo que representa un poco de tranquilidad para una industria que se encuentra paralizada por prohibiciones de viaje y temores de propagación del nuevo coronavirus.
La pandemia de coronavirus ha infectado a más de 180.000 personas y matado a más de 7.100 en todo el mundo. En Estados Unidos, se han registrado casi 4.500 casos, con 80 decesos.
En la mayoría de la gente, el nuevo coronavirus causa síntomas leves o moderados, como fiebre y tos. En algunos, sobre todo adultos mayores y personas con enfermedades ya existentes, puede provocar afecciones más graves, como neumonía. AP
El presidente Donald Trump habla durante una conferencia de prensa con el grupo de trabajo sobre coronavirus en la Casa Blanca el lunes 16 de marzo de 2020. (AP Foto/Evan Vucci)