Bruselas (EuroEFE).- La comisaria europea de Sanidad, Stella Kyriakides, instó este martes a los Estados miembros a “contener de forma agresiva” el avance del coronavirus en la Unión Europea, con el objetivo de ganar tiempo para avanzar en la investigación y descongestionar los sistemas sanitarios en una crisis en la que ya se han declarado casos en todos los países.
En una comparecencia ante el Parlamento Europeo para dar cuenta de la respuesta europea al brote de coronavirus, la comisaria de Sanidad llamó a aplicar medidas de contención, particularmente en los países donde aún hay “pocos” casos y consideró que los próximos días y semanas serán “críticos” en la evolución de la situación.
“Los Estados miembros deben centrarse en los esfuerzos para contener agresivamente el virus, particularmente donde hay pocos casos. Ralentizar el virus debe ser nuestra principal prioridad para ganar tiempo para que los sistemas de salud funcionen de forma efectiva y que avance la investigación”, explicó la comisaria chipriota.
Aunque no especificó ni valoró la actuación de ningún país, sí que subrayó que las decisiones de los Gobiernos para contener estas crisis deben “seguirse al pie de la letra” cuando sean “necesarias y justificadas, aunque sean duras”.
“No podemos seguir nuestra vida como hasta ahora. Estamos enfrentando una situación excepcional y bajo estas circunstancias todo el mundo debe cumplir con sus responsabilidades”, insistió.
Kyriakides informó de que la frecuencia de las reuniones que mantiene con las agencias europeas para actualizarse mutuamente del desarrollo de la situación será de tres a la semana y añadió que ha pedido a los Estados miembros que planeen con antelación para anticiparse a un posible paso al siguiente escenario de respuesta al brote.
Además, señaló que la Comisión espera conocer esta mañana las ofertas que ha recibido a la licitación que lanzó la semana pasada para la compra conjunta de material médico, y confirmó que, a petición de varios Estados miembros, se está explorando una nueva licitación para equipamiento médico respiratorio y kits de prueba para detectar el virus.
Durante su intervención en el pleno, el socialista Nicolás González Casares, que es enfermero de formación y ha trabajado para el número de emergencias 061, apostó por la inversión en la sanidad pública de cada estado y lamentó: “algunos que tanto daño han hecho con recortes abusivos a nuestra sanidad lloran ahora por los recortes”.
Por su parte, la popular Dolors Montserrat aseguró que la Comisión y el Gobierno de España deben poner sobre la mesa una “solución sanitaria, social y económica” que dé apoyo a los sectores más vulnerables y consideró clave la unidad en la respuesta “para evitar una mayor depresión de la economía”.
También en clave económica, Jordi Cañas (Cs) pidió medidas “ágiles, decisivas y firmes” que den respuesta a la población en general y, en concreto, “a los pequeños empresarios, autónomos y empresas”, mientras que Sira Rego (IU) instó a no caer en la “histeria de los mercados” y a poner los recursos de los Estados miembros al servicio del “interés general y de los servicios públicos”.
Por su parte, Hermann Tertsch (Vox), consideró necesaria una política de “fronteras fuertes” para combatir la difusión de la enfermedad, así como evitar que la producción de material sanitario clave no esté en manos de “terceros países”.
Sassoli, dos semanas de cuarentena
El presidente del Parlamento Europeo, el italiano David Sassoli (Foto), anunció este martes que permanecerá en cuarentena en su domicilio durante las próximas dos semanas por precaución tras haber estado en Italia el pasado fin de semana y después de que el país en su conjunto haya sido declarado una zona de riesgo en las medidas preventivas de la propia Eurocámara.
En un comunicado, el político italiano señaló que seguirá las medidas indicadas y ejercerá como presidente de la Eurocámara desde su domicilio en Bruselas “por precaución” durante los próximos catorce días, tal y como indica el protocolo médico.
Fuentes parlamentarias confirmaron que Sassoli viajó a Roma el fin de semana, una región que no estuvo considerada dentro de la zona de riesgo por el propio Parlamento hasta este lunes por la noche, cuando el Gobierno italiano anunció que se extendían las medidas de aislamiento del norte del país a toda la península para intentar contener el coronavirus. EUROEFE EURACTIV